Con muy poco tiempo para dedicarle a este blog, supongo que por eso de la recuperación que parece que está a punto de llegar, no puedo dejar de hacer una reseña a la cena anual de la Delegación del Maresme del Colegio de Aparejadores del pasado viernes en la Nau Gaudí de Mataró.
Como cada año, bajo mi punto de vista, una gran ocasión para reencontrarse con los colegas de profesión con los que difícilmente podemos coincidir a lo largo del año y sus parejas, en un ambiente muy agradable y distendido, y en una pequeña joya arquitectónica que tenemos en Mataró, de visita obligada.
Gran ambientación de la nave, gran catering, divertido concurso visual sobre el modernismo en la comarca, parlamentos especiales de la presidenta del Colegio de Barcelona y del Presidente de nuestra Delegación, que dejan el cargo por fin de sus legislaturas, más de 100 asistentes a la cena, fueron el preámbulo, sin embargo, de un importante momento personal, con el reconocimiento del Colegio a mis 25 años de colegiación. Creo que empiezo a ser un Senior...
Y como no podía ser de otra manera, la dedicación especial de este reconocimiento a mi prometida en los años de facultad, mi aparejadora, mi mujer y la madre de mis hijos, con la que celebré de manera personal los 25 años desde que acabamos la carrera e iniciamos nuestra vida laboral, con trayectorias profesionales diferentes, pero cogidos de la mano.
Espero que lleguemos sin demasiados problemas al reconocimiento de los 50...!
Para ti, Carlota
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