El mantenimiento preventivo de los edificios: la asignatura pendiente de la propiedad en España
En España, la mayoría de los edificios se mantienen por reacción, no por prevención. Se repara cuando se rompe, se llama al técnico cuando ya hay filtraciones, y se actúa cuando la grieta es visible o el vecino se queja. Sin embargo, el mantenimiento preventivo no solo es una buena práctica: es una obligación legal y una necesidad técnica.
🏢 Una cultura de la urgencia
En nuestro país, la cultura del mantenimiento apenas existe. La propiedad —particular o comunitaria— suele ver el gasto en conservación como un lujo, no como una inversión.
Se pintan fachadas cada veinte años, se revisan cubiertas cuando llueve dentro, y se cambian bajantes solo cuando ya han reventado tres veces.
El resultado es previsible: patologías acumuladas, obras más caras y situaciones de riesgo evitables. Lo que podría haberse resuelto con una intervención sencilla se convierte, con los años, en una rehabilitación mayor o incluso en un peligro público.
⚙️ La normativa ya lo exige
El Código Técnico de la Edificación y las normas autonómicas sobre conservación establecen la obligación de mantener los edificios en condiciones de seguridad, salubridad y habitabilidad.
El Informe de Evaluación del Edificio (IEE) debería ser la herramienta natural para planificar esas actuaciones preventivas.
Pero en la práctica, el IEE se realiza muchas veces solo para cumplir un trámite administrativo, y una vez presentado, se archiva sin que nadie ejecute las recomendaciones técnicas.
👷 El papel del arquitecto técnico
Aquí es donde el arquitecto técnico debe tener más presencia. No solo como redactor de proyectos o director de obras, sino como asesor técnico de confianza para la propiedad.
Nuestra formación nos permite:
- Identificar patologías incipientes antes de que sean graves.
- Planificar mantenimientos anuales o plurianuales.
- Controlar costes y priorizar intervenciones.
- Garantizar que los trabajos se ejecuten correctamente y sin sobrecostes.
La conservación no debería depender del azar ni del último presupuesto más barato, sino de un plan técnico coherente.
💸 Mantener cuesta menos que reparar
Numerosos estudios y la experiencia diaria en obra lo confirman:
Cada euro invertido en mantenimiento preventivo ahorra entre tres y cinco euros en reparaciones futuras.Además, un edificio bien mantenido preserva su valor patrimonial, reduce consumos energéticos y evita responsabilidades legales derivadas de desprendimientos o accidentes.
🧱 La arquitectura no acaba cuando se entrega la obra
El mantenimiento es parte de la arquitectura. Cada cubierta revisada, cada junta sellada a tiempo o cada instalación comprobada contribuye a alargar la vida útil del edificio y a dignificar la profesión.
Mientras no asumamos que mantener es construir con inteligencia, seguiremos reparando lo que nunca debió estropearse.
El buen arquitecto técnico no solo construye, también cuida.
Y cuidar los edificios es, al final, cuidar la ciudad.
Etiquetas: mantenimiento preventivo, conservación de edificios, arquitectura técnica, rehabilitación, IEE, patología constructiva, seguridad
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