La vuelta de las vacaciones siempre ha sido dura, para qué negarlo. Sin embargo, este año, después de disfrutar de unos excelentes días de descanso en la costa gaditana, cada kilómetro de la costa andaluza y levantina hasta llegar a casa me ha sido especialmente doloroso, no sólo por la proximidad de nuevo a la rutina de la vuelta al cole (de aparejadores, claro) sino por el paisaje de numerosas poblaciones a lo largo de más de 1.000 km donde contrastan la escasez de infraestructuras de los cascos urbanos, unos edificios envejecidos y sin aparente mantenimiento, con flamantes edificios nuevos totalmente vacíos y con persianas bajadas, muchos de ellos ya con publicidad de diferentes entidades bancarias, con promociones de centenares de "villas" apareadas que inundan las cotas más elevadas de los municipios pero, sobre todo, con el hormigón visto de numerosísimas construcciones a medias. Hormigones en muchos casos ya envejecidos en apariencia, oscurecidos, barras en esperas de muros y pilares tremendamente oxidadas, malas hierbas entre los palets de material abandonado en las antiguas zonas de acopios, gruas inmóviles...
La vuelta va a ser dura y hay muchísimo trabajo por hacer. Sigue bajando la actividad del sector, siguen bajando los precios, hay iniciativas y ganas de trabajar, pero está claro que sin la más minima fuente de financiación, esto va a ser complicado. Habrá que esperar, como estos últimos meses, que nos rescaten, que no nos rescaten, que nos presten o como quieran llamarlo, y mientras tanto, unos cuantos recortes más, la subida del IVA y de las retenciones, pero siempre pensando en que tarde o temprano deberemos empezar a ver algún tipo de luz, no blanca y brillante, ya me vale con una luz tenue y amarillenta. Ya nos hemos olvidado que lo que se vivió estos últimos años, ahora sólo falta volver a empezar sin aquellas pretensiones y con la lección bien aprendida, pero esperemos que cuando empecemos a levantar cabeza no se nos haya olvidado lo que es el hormigón fresco, ese color gris perla, esas barras corrugaditas gris antracita sin óxido...
Sobre la titulación de grado, los compañeros de ADATE-UPAATi han enviado una circular con las instrucciones para homologar el título de Arquitecto Técnico con el "Ingenieur" alemán o "Annerkennung" para quien esté interesado.
Continuamos
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